lunes, 4 de octubre de 2010

"¡En Canal 2, el (misógino) número 1 es usted!"


Es domingo y miro “Ghost Rider” en Canal 2. No es tan buena, pero no hay nada mejor que ver por televisión nacional. La película está inspirada en el comic del mismo nombre, y trata sobre Jhonny Blaze, un motorizado acróbata que pacta con el Diablo para salvar la vida de su padre. Pero el cachudo le hace una mala jugada y termina siendo su lacayo, una especie de cazador de las almas que logran escapar del infierno. Efectos decentes, una historia sencilla y Eva Mendes. No puedo pedir nada mejor. Ya la había visto, por lo que no podría sorprenderme. Curiosamente, mi asombro fue por los cortos comerciales.


De pronto, apareció un anuncio comercial de una de esas empresas que ofrecen consejos sexuales a través de los teléfonos celulares, algo bastante común hoy en día. Lo peculiar, es la imagen que ofrece. Una mujer, en claro gesto de felación, sirve de mueble a su pareja, que cambia canales desde la comodidad de su sofá. Sobre su cabeza hay un televisor, en su mano derecha una mini barra de alcohol, y en su mano izquierda  un cenicero. Con una sensual voz dice “manda la palabra (creo) sexo al número ‘no sé qué’ y recibe tips para el mejor sexo”, mientras usa un bikini amarillo, de rodillas frente a su macho, a punto de realizarle sexo oral. Si esto no es sugestivo, entonces desconozco la definición de la palabra “sugestivo”.

Pasan otros anuncios, sin mucha importancia. Continúa la película, pero la imagen sigue retumbando en mi cabeza. ¡Chocho, ¿cuántos niños y cuántas niñas habrán visto ese anuncio?! Hasta yo, que no creo en las feministas y su (gastado) discurso de “¡este cuerpo es mío!” siento que esa imagen y ese mensaje chocan. ¿No existe acaso una ley que regule ese tipo de spots? A esa hora, muchos niños, y otros no tanto (como yo), no buscábamos más que sano e inofensivo entretenimiento. Y lo obtuvimos con la película, pero los espacios comerciales nos bombardean con consumismo, insensibilidad social y ahora, como si todo eso no bastara, ¡con mensajes sexistas y misóginos!   

¿Y las feministas, dónde están? ¿Por qué no se han pronunciado contra este tipo de anuncios? Espero que estén ocupadas con cosas (“más”) importantes, como criticar a Radio Ya por promover el machismo, a como las he oído. ¿Y Canal 2, por qué se salva? ¿Es acaso por su slogan de “¡en Canal 2 el número 1 es usted!”? ¿O es por ser el medio con mayor difusión (y plata) a nivel nacional? Entiendo que el canal solamente vende el espacio, mas no es responsable por lo que los auspiciantes presenten.

Eso, no es excusa señores de Canal 2. Saquen de circulación ese corto comercial, o si no lo hacen, al menos no traten de pasarlo a horas en que los chateles sólo quieren una excusa para dormirse tarde. Pásenlo durante Primer Hora, para que haya algo más provocativo que los comentarios insulsos de sus presentadoras.  


2 comentarios:

  1. En lo personal a mi me gusta ver canal 2, presenta peliculas un poco mejores que los otros, pero tienes mucha razon esos tipos de caomerciales no son adecuados y las horas en que los ponen no esta bien, casualmente hoy lo mire eran las 8:00 de la noche.

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  2. No vivo en tu país pero los canales de acá no se salvan, pasan algo semejante a horas en que los niños están frente al televisor.

    ¿Y quien regula eso?, nadie. La televisión es dinero y como tal se vende po dinero.


    Saludos.

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